A las 20.15 horas quedaba cerrado, este lunes, el acceso para coches al camino de Punta Nati, una vez completado el aforo de 40 plazas con que cuenta el aparcamiento habilitado junto al faro del noroeste de Ciutadella. Lo hacía poco después de la llegada del primero de los dos buses lanzadera, en esta prueba piloto iniciada este mes de julio para evitar los serios problemas circulatorios que se reproducían verano tras verano, especialmente a la hora de la puesta de sol.
El cierre del acceso no tiene una hora prefijada, pero más o menos coincide cada día. Entre las 20 y las 20.30 horas, el aparcamiento de Punta Nati queda completo y los controladores contratados por el Consell detienen los vehículos en la rotonda de la Ronda Nord y emplazan a utilizar el servicio de autobús que realiza Autocares Torres, con salida desde la Vía Perimetral.
Fluidez y comodidad
Aquellos que llegaron a Punta Nati antes de las 20,15 horas, lo pudieron hacer sin ninguna dificultad en vehículo propio. Los que lo hicieron pasada esa hora, utilizaron el autobús y disfrutaron de la comodidad de llegar al aparcamiento. Y desde ahí, andando unos 500 metros, hasta el faro.
Son dos las frecuencias de bus que se ofrecen al usuario, con horarios que se van reajustando con la hora de la puesta de sol. Así, ahora, el bus hace dos salidas desde la estación de la Vía Perimetral, a las 20 y a las 20.30 horas, y los regresos son a las 21.30 y a las 22 horas. Los tickets anticipados se compran a través de la web de Autocares Torres.
Los controladores de Jomimar Seguridad se muestran satisfechos con la respuesta de los visitantes, que respetan las indicaciones para estacionar sus vehículos en el parking y no oponen resistencia en caso de cierre del camino —algo que sí ocurre a menudo, por ejemplo, en Cala en Turqueta—.
Desde el Consell, el conseller de Medio Ambiente, Josep Juaneda, recuerda que tan solo se trata de una prueba piloto, y que no será hasta pasado el verano que se hará una valoración completa.
Aún así, el primer balance «es muy positivo», porque la implantación del servicio de lanzadera parece haber solucionado los problemas de cada verano. «El operativo está funcionando», asegura Juaneda, quien de entrada se congratula de que «hemos conseguido que el número de coches aparcados en el camino sea cero, no ha habido atascos como los de antes, y los vecinos nos transmiten su satisfacción por la reducción del tráfico». Además, añade, «se está informando a los usuarios; la primera semana transportamos unas cien personas, y sobre todo, logramos compatibilizar la actividad humana con el entorno, ya que Punta Nati es una zona protegida».
Por último, en cuanto al número de pasajeros del bus, «el objetivo no es transportar a cuanta más gente, mejor, sino que todo aquel que quiera ir, pueda». Y recuerda, «el primer año, el bus a Macarella tuvo pocos usuarios, pero ahora está plenamente consolidado».