Las playas vírgenes de Ciutadella son uno de los mayores atractivos de la Isla en temporada alta y el cada vez mayor conocimiento de estos arenales hace que día a día más turistas se animen a visitarlos. Así lo corroboran los últimos datos recopilados por Autocares Torres, que gestiona las rutas hasta Macarella, Turqueta, Son Saura, La Vall y Cala Morell durante la temporada alta para evitar atascos y conservar estos enclaves naturales.
Desde el 2 de mayo hasta el 15 de octubre, periodo durante el cual ha estado operativo este servicio, la empresa ha vendido 154.000 billetes de ida y vuelta, un 13,5 por ciento más que en 2019. De este total, 102.000 han sido para usar la línea 69, que lleva hasta Macarella y que ha funcionado desde el 23 de mayo hasta el 30 de septiembre, lo que significa que casi 400 personas diarias han visitado esta playa en transporte público durante los meses de verano.
Más de un 60 por ciento de los pasajeros que han optado por el autobús para ir a las playas vírgenes de Ciutadella han reservado los tickets en internet. Isidro Bellota, gerente de Autocares Torres, indica, en este sentido, que «la venta online se ha incrementado». Añade a esto Damià Moll, director insular de Transportes, que «con días de antelación ya estaban todas las plazas ocupadas».
Del total de usuarios que reservaron los tickets a través de la página web de la empresa de transporte, 250 respondieron al cuestionario de satisfacción después de haber usado el servicio y lo puntuaron con un 9,15. «Los resultados han sido positivos y mejores que otros años», asegura Bellota, quien también subraya que un 73 por ciento de los encuestados disponían de coche en la Isla y, aún así, optaron por el transporte público para desplazarse.
Mejoras para el próximo año
De acuerdo con esos mismos resultados, un 25 por ciento desconocía la prohibición de acceder en coche a la playa de Macarella durante los meses de verano. A esta falta de información, se suma la inconsciencia de aquellas personas que intentan acceder al parking estando este cerrado al público o saturado, en el caso de otras playas.
«Los carteles no son suficientemente efectivos y estamos buscando nuevas fórmulas para informar de la situación en estos aparcamientos», explica Damià Moll, quien avanza que desde el Consell insular tienen en marcha una aplicación que ofrecerá información en tiempo real sobre la ocupación de los parkings, playas alternativas y transporte público.
Desde el ente insular también tienen previsto mejorar las condiciones laborales de los informadores con la instalación de una caseta que les proteja del sol, actuar para arreglar los caminos de acceso a los aparcamientos e instalar wifi, regular la presencia de caravanas en estos enclaves, facilitar las evacuaciones en caso de emergencia y adecuar un espacio para permitir los giros sin complicaciones a aquellas personas que obvian los carteles.