El volumen de mercancías que pasó el año pasado por el puerto de Maó supuso un incremento del 16 por ciento en relación a 2021, alcanzando de este modo las 747.157 toneladas. El incremento supera las 100.000 toneladas. La cifra, no obstante, está todavía bastante por debajo de las 774.792 toneladas registradas en 2019.
El aumento respecto a 2021 se ha producido de una forma bastante equilibrada en los distintos tipos de mercancía. Así las cosas, la mercancía general pasa de 458.894 a 534.065 toneladas, con un aumento del 16 por ciento, porcentaje que es muy similar tanto en los graneles líquidos como en los sólidos.
No obstante, si la comparativa se establece con 2019, sí que se producen importantes diferencias en función de la tipología de la mercancía. Así, en mercancía general se produce un ligero aumento, apenas 4.000 toneladas, mientras que en los graneles hay un descenso bastante significativo, pasando de las 243.996 toneladas de 2019 a las 213.092 toneladas de 2022.
Toda esta mercancía se movió el año pasado mediante 5.895 contenedores, lo que curiosamente conlleva un descenso en relación a los 6.175 de 2021. Son bastantes menos, además, que los 7.227 de 2019, sin duda una nueva tendencia a la hora de realizar el transporte de estos bienes.
En el conjunto de Balears, en los puertos que son competencia de Autoridad Portuaria, el incremento de un año a otro en el volumen de mercancías fue del 12 por ciento, con un 21 por ciento en La Savina, un 15 por ciento en Eivissa, un 13 por ciento en Palma y un 1 por ciento en Alcúdia.
Pasajeros
En cuanto al tráfico de pasajeros de líneas regulares, el puerto de Maó vio pasar en 2022 a 134.868 usuarios, con una subida de un 25 por ciento en relación a un 2021 todavía algo tocado por la pandemia. Son 7.000 pasajeros menos que en 2019. La cifra de cruceristas también remontó hasta alcanzar los 53.245 visitantes después de un periodo de parálisis por la covid-19. Lejos quedan todavía los 101.090 de 2018.