Los moradores de un nuevo tipo de alojamiento que se abre paso en Menorca son pequeñas criaturas, crisopas, coccinélidos (las simpáticas mariquitas), arácnidos, mántidos, algunas abejas y avispas solitarias e incluso crías de lagartijas y salamanquesas o dragones, que ni son venenosos ni muerden, sino que son muy beneficiosos para el ser humano por su dieta insecticida. Todos estos seres, que normalmente habitan en parques, bosques y jardines, disponen ahora de una pequeña instalación para que se refugien: son los hoteles de insectos, que ya se han instalado en Es Castell, Sant Lluís y Ciutadella, el Ayuntamiento de este último municipio acaba de colocar uno en los huertos urbanos de Sa Vinyeta.
Estas estructuras, construidas con madera de pino y de forma artesanal, tienen formas peculiares, pequeños orificios y rincones en los que sus inquilinos pueden depositar larvas, entrar y salir, y guardarse de otros depredadores, como harían en los restos de madera que encuentran en la naturaleza.
La Granja de Bitxos, que así se llama la firma suministradora de estos elementos para dar cobijo a la fauna auxiliar, fabrica también cajas nido para pájaros y refugios para murciélagos. Antonio Rubio, ambientólogo de esta empresa de Alzira (Valencia), explica que en entornos urbanos, donde el problema para estos animales es «la destrucción de su hábitat por la humanización», las cajas y hoteles son una forma de compensar la falta de huecos naturales y de crearlos de manera artificial para que desarrollen su descendencia, larvas, dentro de las galerías de madera. En otras zonas, como las agrícolas e industriales, el principal problema por el que se extinguen estos insectos es el abuso de pesticidas y fungicidad.
Divulgación
Los hoteles de insectos que se han instalado en Menorca están situados en parques como el de Santa Anna, en Es Castell; en huertos, como ahora Sa Vinyeta en Ciutadella; en zonas de polígono como en Sant Lluís; y también cerca de colegios, porque su tamaño XL tiene también un objetivo: que se visualice y sirva para divulgar su función y la vida de estos animalillos entre los escolares. Es Castell cuenta con uno en el parque próximo a Cala Pedrera y otro hotel en la escuela. Además, programa para el viernes día 24 una charla sobre «La crisis de los insectos polinizadores», a cargo del biólogo Pau Enric Serra (Sala Es Soleiet, 19.30 horas).
Sant Lluís tiene previsto instalar dos hoteles de insectos más, uno en Cala Torret y otro en los huertos sociales, mientras que Ciutadella, además del recién colocado en Sa Vinyeta, ha comprado tamién 18 cajas refugio para murciélagos –voraces insectívoros y un valioso apoyo en la lucha contra los mosquitos, por ejemplo–, y otras 20 cajas nido para pájaros urbanos, que se distribuirán de dos en dos en los centros educativos del municipio; para su instalación el Ayuntamiento tendrá ayuda del Ibanat.
El apunte
Ayudas Verd Urbà para sensibilizar sobre el papel de estos animales
Los ayuntamientos tienen la oportunidad de acogerse a ayudas para instalar este material de conservación y sensibilización sobre la fauna autóctona. Se trata del plan de acción que impulsa la Agencia Reserva de Biosfera. En la línea dedicada a zonas verdes sostenibles se contemplan acciones como instalar cajas nido para aves y murciélagos y refugios de insectos. Ayudas que vehicula el Consell con el programa Verd Urbà.