Nueva restricción a la pesca profesional de Menorca. Las barcas que estén dedicadas a la captura de la langosta verán reducido el tiempo de calada de los trasmallos de 48 a 24 horas por un cambio de normativa que ya ha entrado en vigor. El artículo 7 de la Orden APA/201/2023, de 26 de febrero, por la que se establece un plan de gestión para la pesca de la langosta en las aguas exteriores adyacentes a Balears, especifica que «los buques que desarrollen la pesquería podrán tener calados los artes de trasmallo dedicados a la captura de langosta con un tiempo máximo de veinticuatro horas continuadas de calamento en la mar, debiendo ser levantados de dicho calamento antes de transcurrido este tiempo y pudiendo permanecer a bordo del pesquero».
La normativa, que ya ha sido publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), ha levantado ampollas en el sector pesquero de la Isla, especialmente en aquel centrado en la modalidad de artes menores, de marcado carácter artesanal, que advierte de las consecuencias en el número de ejemplares capturados y en el precio de los mismos. «Esta nueva limitación nos afectará de lleno, disponer de la mitad del tiempo hará que las capturas de langosta vayan a la baja», avisa Ricard Riera, presidente de la Cofradía de Pescadores de Fornells. Riera estima que se reducirá a la mitad la pesca de esta especie de crustáceo para comercializar y critica que la modificación del tiempo de calada de los trasmallos se produce sin justificación alguna y tras varias temporadas que confirman «un incremento de capturas con las mismas barcas».
Una subida de los precios
Coinciden en esto Xavier Marquès, presidente de la Cofradía de Pescadores de Ciutadella, y Martí Mata, presidente de la Cofradía de Pescadores de Maó. Aunque es difícil hacer predicciones, explica Mata que la menor cantidad de langostas disponibles supondrá el aumento del precio del producto, más aún teniendo en cuenta el alza en la demanda que se produce, especialmente, en verano, con la llegada de turistas de calidad y una mayor capacidad de gasto. «Nosotros no queremos esto, pero no queda otra si la captura falla», reconoce, al mismo tiempo que resalta que «el gremio de pescadores se extingue, no hay relevo generacional y con tantas trabas es difícil encontrarlo».
A las restricciones de la Unión Europea para las embarcaciones de arrastre se suma ahora esta nueva limitación para las embarcaciones de artes menores. Subraya Martí Mata que precisamente «los pescadores de artes menores viven de la captura de las langostas durante cinco meses» y se pregunta «qué pasará con ellos ahora que se reducirá el tiempo de calada de los trasmallos y la captura de ejemplares». Si bien el sector pesquero es partidario de que haya intención de regular la actividad para que no haya sobrepesca, no entiende el «afán de proteger tanto» cuando «no hay una alarma que indique que algo está yendo mal, sino todo lo contrario».
Inicio de temporada
La apertura de la veda de la langosta el pasado 1 de abril no ha ido acompañada de un clima favorable. Esto ha impedido que haya, a día de hoy, resultados notables y las distintas cofradías esperan mejorar las capturas más adelante. Tienen hasta el 31 de agosto para hacerlo. Mientras tanto, aprovechan también para cerrar satisfactoriamente la temporada de pesca de la sepia.
Lo que está claro es que se debería prohibir la pesca de la langosta con redes, se debería volver a la nansa tradicional, selectiva, productiva y un 90% menos dañina que las redes que acaban abandonadas en el fondo. Hay zonas de pesca en las que ya no se pueden practicar la pesca deportiva por la cantidad de redes que hay depositadas en el fondo. El pescador profesional de artes menores no vive tan mal hoy día, simplemente hay que observar el poder adquisitivo que tienen algunos, que está muy bien que lo tengan porque el trabajo lo merece, pero que no se quejen tanto que aquí nadie los ha obligado a ser pescadores y que no se preocupen tanto si hoy día las nuevas generaciones ya no quiere trabajar de esta profesión, porque al fin de cuentas el precio al que va la langosta y el pescado de Menorca es prohibitivo para el 80% de la población y recordar a todo el mundo que si no podemos comer el pescado de nuestra propia tierra habrá que comprarlo de marruecos como dicen algunos, que al fin y al cabo tiene las mismas propiedades y beneficios para el cuerpo que el pescado local. Dicho esto, por que tiene que preocuparnos que desaparezca el pescador profesional local si al fin de cuentas los menorquines vemos pasar el pescado y el marisco por nuestras narices para que se lo coman la gente que viene de vacaciones con un alto poder adquisitivo?, pasa lo mismo con los amarres, la mayoría de menorquines no podemos tener barca porque ahora ya ni pagando podemos tener amarre, se los quedan antes la gente de fuera de la isla,(hasta de los estados unidos, fuera de europa), que pidan las listas a puertos y a costas de los amarres en base y verán cuanta gente hay de la otra parte del mundo para tener el barco un mes) y nosotros que vivimos los 12 meses del año y toda la vida en menorca tenemos que estar de transeúntes o como la mayoría sin barca porque un día de amarre te cuesta 25€ mientas que tener base te cuesta 800€ al año. Una vergüenza, pero así es, rodeados de políticos traidores que se pasan la pelota unos a otros frente la opinión publica y que luego se juntan para comer langosta a nuestra costa. Lo que tendríamos que hacer, es acabar con toda esta clase política nefasta que tenemos y empezar a plantearnos si deberíamos salir a protestar seriamente nuestros derechos como hacen en otras regiones y dejar de protestar como estoy haciendo yo entre amigos y la parte baja de noticias que lee una pequeña parte de la población. Los tiempos cambian y hay que adaptarse, recuerdo cuando mi abuela me contaba que por las mañanas desde su tequina, con un rai y unas gafas a 3 metros de agua observaba los meros de 30 kg, paseando mientras pescaba alguna cigala para desayunar e intentaba cambiar con algún predio cercano por carne u otros alimentos. ya no estamos en esos tiempos, evolucionamos y nos adaptamos. si este verano no puedo comer langosta, no creo que me vaya a morir, el año pasado no la comí y aquí estoy. P.D para ALGUN pescador de fornells que le gusta el victimismo: Hoy en día es básicamente imposible que se te queden las redes en el mar por un mal tiempo, que pasa?, no sabes que hay app que te dicen a la hora exacta que cambia el tiempo días antes que suceda?, o es que te pegas unas fiestas nocturnas que no hay quien te levante por las mañanas para ir a recoger las redes?, que no son ni 24, ni 48, ni 72, muchas veces ahí se quedan para siempre. Mas agua y menos alpiste y veras como a final de mes ya no estas tan enfadado cuando veas tu cuenta bancaria mas llena. Para ser tan patriota hay que saber querer a tu tierra tanto con las palabras como con los hechos.