Un voto en los comicios autonómicos del 28 de mayo emitido por un ciudadano de Menorca tiene el mismo peso electoral que 3,4 sufragios depositados en las urnas en los colegios de Mallorca.
Los casi 828.000 electores llamados a designar a sus representantes en el Parlament el 28M no tienen una capacidad de decisión pareja porque votan repartido en cuatro circunscripciones insulares cuya representatividad no es proporcional a la población.
La cámara autonómica tiene 59 diputados: 33 representantes de los ciudadanos de Mallorca, 13 de los de Menorca, 12 correspondientes a Ibiza y 1 por Formentera.
Si la circunscripción fuera única, la proporción de electores potenciales por cada diputado sería de poco más de 14.000, pero con el reparto de representación en la cámara por islas por cada parlamentario de Mallorca hay 19.620 electores, 8.226 por diputado ibicenco, 7.176 para elegir al único representante de Formentera y 5.735 por cada uno de los 13 de Menorca.
De esta forma, los ciudadanos de Menorca están representados en una proporción de 1/3,4 respecto a los de Mallorca, de 1/1,4 sobre los de Ibiza y de 1/1,2 en relación a los de Formentera.
Entre Ibiza y Mallorca, la relación es de 1/2,3 y entre Formentera y Mallorca, de 1/2,7.
El número de diputados por islas está consagrado en la Ley Electoral autonómica de 1986, que justifica el reparto aludiendo al acuerdo alcanzado por los redactores del Estatuto de Autonomía de 1983, cuando se determinó, en una disposición transitoria, que en las primeras elecciones se elegirían 30 diputados en Mallorca, 12 en Menorca, 11 en Ibiza y 1 en Formentera.
La sobrerrepresentación de las circunscripciones con menos población no es una anomalía balear, sino, al contrario, una constante en organizaciones territoriales democráticas dirigida a garantizar la voz de las minorías y estimular su participación.
Así, aunque la demografía tiene su peso en el reparto de diputados, la representación de las provincias en el Congreso español presenta disparidades tan significativas o más que las del Parlament balear.
Por ejemplo, a Baleares le corresponden ocho representantes en la Cámara Baja, cuatro veces más que los que tiene Soria, pero la población de las islas es casi trece veces mayor que la de la provincia castellana.
El Consell de Eivissa aprobó por unanimidad una resolución en noviembre del año pasado en la que, apoyado en un informe jurídico encargado por la institución, reclamaba cambios legales para corregir la subrepresentación de la isla respecto a Menorca. El dictamen consideraba justificada la infrarrepresentación de Mallorca.