El Ayuntamiento de Ferreries sacará a licitación, tras la presente temporada estival, las obras para ejecutar la primera fase de la renovación total de la red de agua potable en la urbanización de Cala Galdana. El montante global de la mejora de esta infraestructura es aproximadamente de un millón de euros, ha precisado el alcalde, Pedro Pons.
Los trabajos deberán comenzar a principios de 2024 para que esta primera intervención esté ejecutada al menos en un 50 por ciento antes del 31 de marzo. Por tanto, la concesión a la empresa constructora deberá estar decidida a finales de otoño. Es la condición indispensable que implica la financiación parcial del proyecto con capital procedente de los fondos europeos, según consta en la documentación que maneja el Consistorio.
La sustitución de la red de suministro de agua potable se trata de un trabajo necesario, como constató el informe encargado al ingeniero Xavier Genestar, meses atrás, cuando el servicio pasó a ser municipal a finales del pasado año. Hasta entonces la gestión de la red en la urbanización ferreriense corría a cargo de la comunidad de propietarios de Cala Galdana.
El informe técnico reveló el mal estado de la infraestructura, entre ella el del depósito, con fugas y canalizaciones muy desgastadas, y concretó la necesitad de su progresiva sustitución en un plazo medio. El Ayuntamiento pidió entonces al mismo profesional que había redactado el documento, que elaborara el proyecto para conocer su coste y poder avanzar en la tramitación.
El inicio de la red de agua potable de Cala Galdana parte de los pozos situados en la zona de Serpentona, en la finca de Santa Galdana, que corresponde al término municipal de Ciutadella, y de la fuente situada en el Barranc d'Algendar que pertenece a Ferreries. El agua potable que suministra al núcleo turístico de Cala Galdana viene de ambos surtidores, aunque la que emana de los pozos de Serpentona, a cargo del Ayuntamiento de Ciutadella es refacturada al de Ferreries.
El Consistorio tiene confirmada la recepción de 350.000 euros de Europa para hacer frente al total de la obra, que irá incorporando a su presupuesto durante las tres próximas anualidades en diferentes porcentajes. Los 650.000 euros restantes para completar los trabajos deberán aportarse con los propios fondos municipales aunque el alcalde ya adelanta que pedirá ayuda para la financiación tanto al Consell como al Govern.
Finalmente decidimos hacer inversiones que se deberían haber hecho hace mucho tiempo para que la isla siga siendo un destino turístico frente a la competencia. Hizo falta una temporada media y la caída general del poder adquisitivo para que los responsables se dieran cuenta del daño potencial que la situación podía causar...