La nueva estación marítima de Maó, en la zona del Cós Nou, tendrá unos 2.500 metros cuadrados, menos de la mitad de las previsiones iniciales de Autoridad Portuaria de Balears, que cuando planteó el proyecto por primera vez, en el ya lejano 2008, contemplaba la construcción de un edificio de 6.000 metros cuadrados, distribuidos en dos plantas, con un presupuesto de unos diez millones de euros.
Quince años después, el ente portuario ha publicado una nueva licitación para la redacción del proyecto, que incluye la ordenación de la superficie y los viales de las explanadas del Cós Nou, pero ha redimensionado el proyecto para adaptarlo al contexto actual, marcado por el aumento del tráfico de pasajeros en el puerto de Son Blanc de Ciutadella, en detrimento de Maó. El nuevo contrato cuenta con un presupuesto de 725.638,30 euros, e incluye la propuesta técnica de diseño, a modo de concurso de ideas, así como la dirección de las obras. El plazo de ejecución de los trabajos de redacción del proyecto será de nueve meses.
De esta manera, la reactivación del plan de construcción de la nueva infraestructura de la rada mahonesa, servirá para sustituir el actual edificio provisional del muelle del Cós Nou, de más de mil metros cuadrados, que da servicio desde el año 2015.
Descenso de pasajeros en Maó
A pesar de que en 2008 entre las previsiones de APB ya se contemplaba un posible descenso del número de pasajeros de líneas regulares en el puerto de Maó con la entrada en funcionamiento del puerto de Son Blanc, lo cierto es que la inauguración de la nueva infraestructura portuaria en Ciutadella, que se puso en marcha en 2011, ha supuesto un cambio importante en la distribución de pasajeros.
Durante los meses de julio y agosto de este año, por ejemplo, el tráfico de pasajeros de líneas regulares en Maó se desplomó un 30 por ciento, lo que contrasta con los récords históricos de este verano en Son Blanc. Este descenso también se aprecia claramente en el número anual de pasajeros en la rada mahonesa, que en 2022 fue de 134.000, un 26 por ciento menos que en 2008, cuando por el puerto de Maó pasaron 181.000 pasajeros. Por otro lado, en los últimos años la actividad crucerista y la náutica deportiva han ganado importancia en Maó, estableciendo una diferencia cada vez más clara entre los usos de los dos puertos de la Isla.
Por todo ello, la nueva estación marítima que proyecta la APB para el puerto de Maó será mucho más modesta que la prevista en 2008, y contará con aproximadamente 2.500 metros cuadrados de superficie, en los que se dispondrán los servicios propios de este tipo de instalaciones, como un distribuidor en la entrada con taquillas de expedición de billetes, zonas de espera para pasajeros, cafetería, aseos y un aparcamiento en la zona exterior. Además, el edificio tendrá una conexión directa con los buques mediante pasarelas aéreas.
Se gastaron 200.000 euros en el concurso de ideas
En 2008, cuando se presentó la idea de construir una nueva estación marítima, alejada del centro urbano y con garantías de seguridad, se convocó un concurso de ideas que debía servir de inspiración para el nuevo edificio, y que ganaron los proyectos «Capifort», de Jorge Bernabeu y Antonio Montes, y «Nui», de Bernardo García y Marcos Jesús Pantaleón. Ambos proyectos se llevaron un premio de 100.000 euros cada uno.
Es inconcebible gastarse millones en un puerto artificial teniendo a 45 Km. uno con todas las infraestructuras necesarias, solo para promover su declive, el único beneficiado son las navieras que gastan menos combustible, ¿ a caso se ha notado la bajada de precios de los productos ? se imaginan en la península un puerto cada 45 Km. todo este desvarío se debe en su momento a un puñado de votos. La respuesta del " Govern" es como hay menos viajeros mas pequeña la terminal, en vez de promover el resurgimiento de este fantástico puerto no solo por su belleza si no por su historia única en el Mediterráneo, el puerto de Maó es un legado de todos los menorquines y apartarnos de estos localismos baratos.