Entre ayuntamientos, Consell y otras entidades locales, Menorca ha propuesto un total de doce proyectos de mejora de la competitividad en el ámbito turístico por un importe de 9,5 millones de euros para que el Govern los financie con los fondos Next Generation de la Unión Europea en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Las doce propuestas de Menorca son solo una ínfima parte del total de 303 candidaturas presentadas en el total de Balears, correspondiendo 213 a Mallorca por un importe de 152,9 millones de euros, 75 a Ibiza por otros 27,7 millones y tan solo 3 a Formentera por 1,9 millones. Por tanto, sorprende la diferencia entre Menorca y Eivissaa, ya que los proyectos de la primera tan solo representan una tercera parte del presupuesto de la mayor de las Pitiusas.
Selección de las propuestas
Aún así, los proyectos, que se irán conociendo en las próximas semanas, todavía se tienen que analizar en detalle y someterse a un cribado para ajustarse al presupuesto general. La convocatoria del Govern tiene un importe asignado de 60,5 millones de euros, de los cuales 44,5 están pensados para el único programa al que puede acceder la Isla, el conocido como programa 1.
Este englobaría aquellas actuaciones dirigidas a todos los municipios y que se destinan, en su mayoría, a la mejora de infraestructuras públicas, la promoción del turismo, la gestión medioambiental o el tratamiento de residuos. Asimismo, también se incluirían otros factores de peso como la promoción de la movilidad sostenible, la recalificación de aquella infraestructura turística obsoleta o el refuerzo de los servicios públicos en zonas de especial influencia turística, como pueden ser los servicios administrativos, sanitarios o de seguridad. Además, la formación vinculada al sector turístico también estaría incluido.
El apunte
Excluida del programa 2 al no contar con ninguna zona turística madura
Formando parte del programa 1, Menorca queda excluido del programa 2, ya que en la Isla no existe ninguna zona calificada como madura o saturada, un término administrativo creado en un principio para definir la zona de la Playa de Palma en Mallorca y que se extiende también en la actualidad a Llucmajor, Calvià o Manacor, entre otros, donde se busca «desestacionalizar la oferta turística, fomentar su calidad y contribuir a la mejora general», según indica la propia ley. El conseller de Turismo, Jaume Bauzà, ha asegurado que se «encontrará una salida» a todos aquellos proyectos que se queden fuera de los dos programas de la convocatoria, «ya sea a través del Impuesto de Turismo Sostenible como de nuevas subvenciones que se publicarán en breve».