Las cámaras situadas a la entrada de la plaza Esplanada y de otros dos accesos al centro, las calles Sa Lluna, Anselm Clavé y Sant Jordi, comenzaron su periodo sancionador el pasado 1 de marzo con el propósito de pacificar el tráfico y ganar en seguridad.
Desde entonces, en su primer mes de aplicación, que ha sido marzo, han captado a 1.776 conductores que han hecho caso omiso a la prohibición de entrar al centro peatonal de la ciudad. Al no contar con autorización para hacerlo van a ser sancionados.
Estos conductores infractores suponen el 6 por ciento del total de 28.574 que registraron los dispositivos durante el mes pasado. Unos 4.000 vehículos disponen del permiso para acceder por las calles donde están las cámaras al ser propiedad de residentes, transportistas, personas con movilidad reducida o conductores que habían solicitado previamente el permiso de 48 horas. Las multas son de 80 euros, la mitad si se abona en pronto pago.
La campaña informativa para evitar que los coches no autorizados accedan al centro se ha traducido en un aumento progresivo de la buena praxis circulatoria. Durante los 12 primeros días un 11 por ciento de los vehículos que se adentran en la zona de acceso limitado no tenían permiso para hacerlo, mientras que con el paso de los días, según los datos ofrecidos por el Consistorio, el porcentaje se ha reducido al 6 por ciento.
A les entrades a Maó et trobes amb CINC senyals ENORMES avisant tant si baixes per Vasallo com per J. A. Clavé. És impossible entrar sense veure aquestes senyals. A més han deixat passar moltíssim temps sense multar. Les multes estàn molt ben posades.