La presencia de ratas en las calles de Ciutadella sigue siendo motivo de controversia política en la ciudad del poniente de la Isla, y ahora la concejala de Salubridad Pública, Esther Mascaró, acusa al anterior equipo de gobierno del PP de dejar caducar el contrato con la empresa de desratización a propósito, con el objetivo de perjudicar al nuevo gobierno de izquierdas. Mascaró realiza estas acusaciones en una carta publicada en la edición impresa de «Es Diari», y responde, de esta manera, a la exalcaldesa Juana Mari Pons, que la semana pasada solicitó una «actuación urgente» y «grandes batidas de desratización» para solucionar el problema de la proliferación de estos animales en el casco antiguo, que están afectando a la instalación de fibra óptica en esta zona de la ciudad.
Sin contrato
En la carta, Mascaró asegura que los técnicos municipales advirtieron al anterior equipo de gobierno de que el contrato de desratización y control de plagas finalizaba el pasado 18 de agosto, y que no era posible prorrogarlo. A pesar de ello, la concejala socialista denuncia que no se activó la redacción de los pliegos para licitar el nuevo contrato.
«Queda claro que no le preocupó en absoluto que Ciutadella se quedara sin contrato de desratización al principio del curso escolar, ni durante buena parte del verano, ni que los avisos por ratas en el pueblo se encontrasen con dificultades para ser atendidos debido a la falta de un contrato vigente que no se tramitó», señala Mascaró con relación a la actuación de la exalcaldesa, a quien acusa de querer «perjudicar con ello al adversario político».
Desde el Ayuntamiento también explican que el nuevo concurso ya está en fase de anuncio público.