El desahucio de una mujer de Ciutadella, viuda y con una discapacidad del 33 por ciento, y su sobrino, con una discapacidad todavía mayor (del 71 por ciento) ha quedado aplazado.
Una treintena de personas, convocadas por la Plataforma Menorca per un Habitatge Digne y CGT Menorca, se han movilizado la mañana de este jueves para evitar el desalojo que se tenía que ejecutar por orden judicial de una vivienda situada en el Camí de Maó, en la rotonda del Cavall.
Se han personado el secretario judicial y la procuradora de la propiedad, así como agentes de la Policía Nacional. La comitiva judicial ha accedido a la vivienda para hablar con los inquilinos y conocer el sobrino y el estado de la casa, ya que los arrendatarios denunciaban que algunas partes de la vivienda, como el cuarto de baño, estaban muy deterioradas y que la propiedad se negaba a arreglar.
Finalmente, se ha decidido posponer el desalojo hasta final de mes de septiembre, con el objetivo de que en este plazo se intente llegar a un acuerdo para renegociar el contrato de alquiler. «La propiedad me hizo una primera propuesta, pero es abusiva e imposible de asumir», afirma la inquilina Sisca Riutort que lleva 30 años vivienda en esta casa, y confía que, tras esta visita, «se haga una propuesta más ajustada».