El Ayuntamiento de Ciutadella prioriza la apertura de nuevos pozos a ampliar la recepción de agua desalinizada, al menos hasta que la planta de Rafal Amagat no esté conectada con el depósito municipal de Es Caragolí, el más importante de la ciudad.
El alcalde Llorenç Ferrer se entrevistó este lunes con el director general de Recursos Hídricos, Joan Calafat, quien le anunció que ya se dispone del anteproyecto de la obra, que costará 6,4 millones de euros, la financiará en su integridad la Conselleria del Mar del Govern y requerirá de dos años de construcción.
Actualmente, Ciutadella recibe casi 1,2 millones de metros cúbicos de agua desalada, que paga a la Agència Balear de l’Aigua i la Qualitat Ambiental (Abaqua) por 1’7 millones de euros. Supone apenas una cuarta parte del agua total que abastece a la población, ya que el 75 por ciento restante proviene de aguas subterráneas.
1’2 millones de metros cúbicos
Hasta ahora solo se utiliza el 34 por ciento de la capacidad máxima de la desaladora. Según el convenio vigente entre ambas partes, si en el futuro se incrementa el suministro de agua desalada en más de un 20 por ciento, el Govern balear se compromete a revisar a la baja el precio que ahora paga el Ayuntamiento, a razón de 1’55 euros por metro cúbico. Pero es una medida que en principio no se prevé, al menos, en los dos próximos años.
Lo que sí contempla el nuevo gobierno municipal es la posibilidad de realizar nuevas captaciones de agua, «en coordinación con Recursos Hídricos», con el objeto de garantizar un suministro de mayor calidad. El Consistorio no apunta de momento posibles ubicaciones, pero sí el Plan de Gestión Sostenible del Agua, aprobado inicialmente, que propone comprar pozos ya existentes antes que acometer nuevas perforaciones, preferiblemente en la zona de Son Planes.
En cualquier caso, el alcalde Llorenç Ferrer prefiere no ser taxativo al respecto, ya que se trata de decisiones técnicas que pone en manos de Recursos Hídricos.
Pese a la sobreexplotación que han sufrido numerosos pozos a lo largo de las últimas décadas, la situación a día de hoy es buena. El alcalde lanza un «mensaje de tranquilidad» a la ciudadanía, ya que «el agua es potable y perfectamente apta, sin problemas, para el consumo humano». De hecho, los índices de nitratos se mantienen dentro de la normalidad, de los límites establecidos como seguros. Así lo corroboran los análisis periódicos enviados mensualmente y de forma regular al Ministerio de Sanidad, que no ha emitido ningún informe desfavorable que indique cualquier riesgo para la salud pública.
El equipo de gobierno dice «seguir trabajando para garantizar que el agua que llega a las casas cumple con todos los estándares de seguridad y calidad establecidos por las autoridades competentes».
Mejora en la depuradora sur
En este sentido, la segunda iniciativa planteada en la reunión por Recursos Hídricos pasa por mejorar el tratamiento terciario de la depuradora sur de Ciutadella, con el objeto de ampliarlo de 15.000 a 20.000 metros cúbicos y lograr así que el agua regenerada cumpla también los requisitos adecuados de calidad y pueda ser utilizada para el riego.
El consumo de la población censada en Ciutadella fue en 2022 de 278 litros por habitante y día, levemente superior al límite máximo de 250 litros que marca el Plan Hidrológico de Balears. En estos últimos años, las fugas en la red se han reducido.
favarixten q escribes,en catalan o castellano,a parte,no se te entiende nada de nada