Después de más de tres décadas de abandono, s’Enclusa, la antigua base militar situada en el término municipal de Ferreries, comienza a dar pasos firmes hacia su transformación en un espacio público de referencia. El Consell ha presentado este martes las actuaciones previstas para rehabilitar este enclave emblemático y convertirlo en un centro de usos educativos, ambientales, culturales y sociales abierto a todos los menorquines.
Los primeros trabajos ya se han iniciado. Gracias a una inversión de dos millones de euros procedente del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino, se ha realizado un desbroce integral del entorno a cargo del Ibanat. En breve comenzarán también las tareas de limpieza del interior de los edificios y la delimitación perimetral del recinto con pared seca tradicional. Estas actuaciones se completarán con la mejora del sistema de videovigilancia, que ya ha sido reforzado, y con un proyecto de recuperación de la memoria histórica de la base, en el que se recogerán los testimonios de quienes vivieron o trabajaron en ella durante su etapa como instalación militar.
Pero la intervención va mucho más allá del acondicionamiento físico del lugar. Con una aportación de más de 430.000 euros procedente de los fondos de la Ley de la Reserva de la Biosfera, se redactará el proyecto arquitectónico y técnico que permitirá dotar al recinto de nuevos usos. Está prevista la creación de una casa de colonias con todos sus servicios —lavandería, comedor, cocina y tienda—, así como aulas de naturaleza, zonas lúdicas al aire libre, y un centro interpretativo dedicado a la divulgación de los valores ambientales de Menorca, la cultura local y la historia del propio recinto. El espacio contará también con una cafetería para dar servicio a los visitantes.
«Convertimos un antiguo edificio militar en un enclave para los menorquines. Es un proyecto largamente esperado, y por fin empezamos a hacerlo realidad», ha señalado el presidente del Consell, Adolfo Vilafranca, durante la visita al recinto. En el acto también han participado el conseller de Medio Ambiente, Simón Gornés; la directora insular de Promoción Turística, Juana Mari Pons; y el alcalde de Ferreries, Pedro Pons.
Además, el acuerdo firmado con IbDigital permitirá trasladar todas las antenas actuales a una nueva ubicación cercana al depósito de agua. Este cambio no solo mejorará la cobertura de telecomunicaciones en la isla, sino que también reducirá el nivel de radiación presente en la montaña.
Para el alcalde de Ferreries, esta iniciativa representa una oportunidad única para revitalizar el entorno: «Después de más de 30 años, desde que se marcharon los últimos militares, comenzamos a trabajar para que s’Enclusa se convierta en un polo de atracción para ferreriencs, menorquines y visitantes. Es un espacio con un enorme potencial, que podrá disfrutarse durante todo el año».
Está incompleto: la decisión de reutilización y recuperación ha de incluir el examen de conciencia y pormenorización del porque no se utilizó y ocupó enseguida, y porqué se llego a la canibalización , con la delimitación de causas legales, trabas administrativas inepcias y errores y detectar adonde fueron a parar los millones finalistas que se concedieron desde el Gobierno central., y que no se utilizaron en el anterior proyecto El asunto da para un libro blanco previa investigación e identificación de lo que estuvo mal y los efectos que produjo y como se podría evitar en el futuro de cara a otros bienes de equipamiento cuando cambian de uso. APRENDER DE LOS ERRORES CORREGIBLES E IDENTIFICAR LOS EFECTOS PERJUDICIALES. ESO SI QUE SERÍA PEDAGÓGICO. si no aprendemos del pasado lo repeterimos multiplicado, porque cuantos más funcionarios más dificil es cambiar una bombilla. lo de S'Enclusa llegará a estudiarse en manuales.