Una unión temporal de empresas formada por FCC y Comsa se encargará de instalar el sistema que conectará a la red eléctrica los ferris que atracan en el Cós Nou de Maó para evitar los ruidos que se generan por la necesidad de mantener los motores en marcha durante la escala. Autoridad Portuaria ha adjudicado la obra por 3,4 millones, IVA incluido, lo que supone un ahorro de 620.000 euros sobre el presupuesto inicial.
El plazo de ejecución de los trabajos es de nueve meses y se estima la creación de 15 puestos de trabajo directos durante la obra. Hasta ahora el sistema Onshore Power Supply (OPS) también conocido como cold ironing solo está disponible en los muelles de poniente de Palma. Ahora se extienden, además, al resto de islas. En el caso de Maó tendrá una potencia de 1.600 kW y se ubicará en el Cós Nou. Además de evitar ruidos, el sistema permite una reducción de emisiones contaminantes.
Ha sido niño