El sindicato UGT Ensenyament se ha sumado a las críticas a la Conselleria de Educación por no atender la petición de 11 familias de Ferreries que se han quedado sin plaza en la escuela pública de la localidad —el CEIP Castell de Santa Àgueda—, viéndose obligadas a matricular a sus hijos en un centro concertado o en otro municipio.
Desde UGT exigen a Educación que se garantice «el derecho a una plaza pública para todos los alumnos que lo soliciten» y remarcan que «el acceso a la escuela pública no puede depender del lugar donde se reside».
«El PP ha promovido y mantenido como eslogan el derecho de las familias a elegir la escuela que mejor se ajuste a sus valores, pero esta postura queda vacía de contenido si no existe una oferta pública suficiente para hacer efectiva esa elección», señalan.
Me parece perfecto. Hace unos días, UGT y CCOO recibieron una millonada del Gobierno del PSOE y compañía, para que guardaran silencio ante la ola de corrupción que se ha destapado recientemente y que afecta directamente a Sánchez. Que destinen una parte de ese dinero recibido a financiar las plazas que ahora se están reclamando. Y santas pascuas.