Menorca padece un déficit de equipamientos y profesionales para atender los trastornos de salud mental que ha llevado a la presidenta de la Associació de Familiars i Amics per a la Salut Mental (Afasme), Lina Salord, a calificar la situación de desprotección de la sociedad ante un problema que, lejos de resolverse, se agudiza. Salord alerta especialmente de la necesidad de detección temprana, en las primeras etapas educativas, de esos trastornos o malestares emocionales para evitar que se arrastren en la adolescencia y se conviertan en crónicos, ya en la edad adulta.
La asociación vuelve a alzar la voz para reivindicar equipamientos: una unidad de patología dual, para tratar la coexistencia de trastorno mental y adicciones; una unidad insular de geriatría específica para personas mayores con trastornos mentales, «que también tienen derecho a acceder a un geriátrico»; y un centro de media estancia o convalecencia para que los pacientes que reciben el alta hospitalaria, tras haber sido ingresados por una descompensación, no deban regresar de inmediato a sus casas, sino que puedan recuperarse en un espacio adecuado. Afasme ya planteó que el futuro hospital sociosanitario Verge del Toro, debería reservar un espacio para estos pacientes, y evitar así ingresos en Palma.
La punta del iceberg
Afasme considera que falta una estadística exacta sobre salud mental en la Isla. En 2019 la Conselleria de Salud cifraba en 15.000 las personas diagnosticadas con un trastorno de salud mental en Menorca, 400 de ellas con trastorno mental grave, y de esa cifra global, 3.200 eran niños y adolescentes. Todavía no había llegado la pandemia de covid-19 que generó y también puso al descubierto más estados emocionales inestables, como pudo constatar Afasme, con más llamadas de «familias angustiadas» por no saber gestionar situaciones tras el confinamiento. Conductas extremas, con adolescentes, por ejemplo, que después del encierro ya no querían salir de casa o aquellos que hacían exactamente lo contrario.
En 2023 la Coordinación Autonómica de Salud Mental elevó el dato de afectados a 17.000 personas pero lo cierto es que, desde la asociación de familiares y amigos creen que «no se conoce de verdad la realidad de Menorca, los equipos existentes no dan abasto, hay muy pocos profesionales y la lista de espera es enorme, en niños y jóvenes está desbordada», lamenta su presidenta.
Salord pone sobre la mesa otro problema creciente, y es el de personas adultas con trastornos de salud mental pero que nunca han sido diagnosticadas, han vivido bajo el amparo de unos padres que ahora se hacen mayores, «gente de mediana edad cuyos padres envejecen, tienen más de 70 o incluso 80 años y ahora no saben qué hacer, su hijo no tiene un diagnóstico ni una medicación», señalan desde la entidad.
En el otro extremo, el de la infancia, la asociación echa en falta más formación destinada a los docentes, para la detección de problemas emocionales de los pequeños, y aunque aplaude la decisión de contar con psicólogos en los institutos y centros de FP desde este último curso, recuerdan que faltan profesionales en las etapas de Infantil y Primaria porque los que hay, son insuficientes para la demanda. «Nosotros somos familiares, no especialistas, damos apoyo y ayudamos a que se conozcan los recursos existentes». Sobre cómo se ha llegado a esta situación, Afasme señala la doble insularidad que padece Menorca, con menos recursos que Mallorca, y también hace autocrítica, «¿qué ha fallado?, tal vez la propia sociedad, no hemos reclamado y ahora estamos desbordados», reflexionan.
Las claves
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Unidad insular de geriatría
Destinada a personas mayores diagnosticadas con un trastorno de salud mental y que necesitan acceso a cuidados geriátricos. Se reclama una unidad para toda la isla, ya que en las residencias convencionales podrían darse problemas de convivencia.
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Unidad específica de patología dual
Afasme reclama la creación de una unidad de patología dual, para personas con problemas de salud mental y adicciones. La entidad ya ha contactado con la federación española Fedepadual y planteará su petición en una próxima reunión con la gerencia del Área de Salud de Menorca.
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Centro de media estancia
Un dispositivo de atención que la entidad lleva tiempo reclamando y que se podría ubicar, afirman, en el futuro hospital Verge del Toro. Es un espacio para los pacientes con trastorno mental que requieren un tratamiento más largo que el de la hospitalización en la unidad de agudos, pero sin llegar a ser crónicos. Una convalecencia antes de volver a casa.
EscorbutoSa traducció ni d'enfora costa milions, açò és totalment ridícul. Donada sa persecució que han sofert moltes llengües minoritzades, és una acció positiva que atraca els territoris, mentre que s'altra separa i enfronta.