La cancelación ayer de cuatro vuelos de Vueling, debido según informó la compañía a la regulación del tráfico aéreo en Barcelona, a la alerta meteorológica, estropeó el final de las vacaciones y el retorno a casa de turistas que se hallaban en la Isla y que debían atender obligaciones laborales y otros compromisos en su lugar de origen. La reubicación en otros vuelos durante la jornada de ayer fue imposible para algunos pasajeros afectados, a quienes se les ofreció esperar al domingo día 31 para volver y en otros casos hasta el lunes día 1; sus opciones eran esperar y ser realojados por Vueling durante el fin de semana en Menorca, o bien la devolución del billete, en efectivo o en crédito para volar en otra ocasión.
«Con el reembolso no nos llegaba para coger un billete en otro vuelo hoy mismo porque nos costaba 900 euros para los tres», explicó ayer Claudia en la terminal de salidas del aeropuerto, a donde acudió junto a su marido y sus dos hijos a preguntar por su vuelo en el mostrador de facturación. El padre, que viajó en barco solo, para transportar el coche, regresa hoy a Barcelona, mientras que los otros tres miembros de la familia se debatían ayer al mediodía sobre qué hacer. «Yo mañana trabajo y nos ofrecen reubicarnos en un vuelo que sale el domingo a la medianoche y llega a Barcelona a la una de la madrugada», lamentaba esta turista, «ahora va a llegar antes él en el barco».
Su vuelo fue uno de los dos de ida a Barcelona que fue cancelado, el que debía salir a las 15.45 horas. Otra queja de esta familia es que no hay oficina de Vueling en el aeropuerto menorquín, todas las quejas y reclamaciones hay que hacerlas on line, aunque en la facturación sí les ofrecieron la opción de buscarles alojamiento hasta la salida del vuelo el domingo 31.
Otros afectados expusieron sus quejas en las redes sociales. «Le canceláis el vuelo a mis padres y se lo pasáis al lunes a las 23 horas, unas personas de 75 años, no lo entiendo, ¿os parece normal?», publicaba en X un usuario, y otro se preguntaba por qué Vueling, «es curioso que no afecte a vuelos de otras compañías como Ryanair».
Cristina fue otra pasajera que hizo público su caso en X y ofreció su testimonio a «Es Diari». En la tarde del miércoles el aviso de Vueling sobre la cancelación de su vuelo para ayer la mantuvo en vilo. La oferta de la compañía era regresar a Barcelona el lunes 1 de septiembre a las 10.30 horas, cuando ese día Cristina ya tenía que estar trabajando. Una familia de cuatro tuvo que cambiar el final de sus vacaciones en la Isla.
«Hemos comprado un billete con el ferry para mañana (por hoy viernes), estamos en Fornells y hemos tenido que cambiar de hotel y coger una noche más, también hemos modificado el alquiler del coche para extenderlo un día», explicó ayer por teléfono, «pero ahora ya no lo podemos devolver en el aeropuerto, menos mal que la empresa se ha portado bien, lo dejaremos en sus oficinas y nos llevarán a la estación marítima con un transfer», afirmó. Esta pasajera tendrá que reclamar todos los gastos extra a Vueling. Lo extraño, comenta, es que «hace unos días, cuando aún no había alerta meteorológica, ya recibí un aviso de la aerolínea en el que me proponían retrasar mi vuelo al día 30».
OffNi fuerza mayor, ni pitos ni flautas. Vueling ha hecho algo que de vez en cuando hace (muchas veces para mi gusto) y es dejar a la gente tirada. Vueling, como cualquier compañia tiene la obligación de buscarle alternativa lo más rápido posible, pagar los gastos y la indenización. Vueling, por suerte, no puede lavarse las manos y que te apañes. Aqui lo que pasa es que todos tragamos y no denunciamos y así se van de rositas. Dicho de un CEO importante de una compañia importante. Nos sale mas barato.dejar a gente a tierra que pagar un piloto o alquilar un avíon, pagamos el mínimo y solo unos pocos llegam al final son su reclamación. Osea juegan a que te canses al reclamar, para que te paguen el mínimo pq les sale más a cuenta que tener una organización eficiente con suficiemtes recursos.