El parque fotovoltaico Agrisolar de Es Mercadal, el segundo de mayores dimensiones de los construidos hasta la fecha en la Isla, ya tiene vía libre para conectarse y empezar a volcar a la red sus 20 megavatios (MW) de potencia instalada.
Red Eléctrica ya ha concluido las obras y recabado todas las autorizaciones para la ampliación de la subestación de Es Mercadal, paso imprescindible para la conexión de la planta. Es el final del túnel para los promotores, que llevan prácticamente dos años esperando, los que han pasado desde que finalizaran las obras del parque en octubre de 2023.
Fuentes de la empresa explicaban ayer a este diario que están pendientes de los últimos trámites y que en el plazo de un mes se prevé que la instalación pueda entrar en escena. Por el camino se habrán perdido dos años en los que el parque ha empezado a envejecer sin que se haya podido verter energía limpia a la red, ni obviamente empezado a recuperar la inversión realizada, que ha ascendido a más de 17 millones de euros, con una ayuda pública aprobada de 2,7 millones de euros para la que no se han cumplido los plazos, aunque no por culpa del promotor.
La puesta en marcha del parque Agrisolar, bautizado así porque el proyecto compatibiliza la actividad agraria con la generación de energía fotovoltaica, supondrá un nuevo salto para la transición energética de la Isla. Hay que tener en cuenta que los seis parques solares que están en funcionamiento en estos momentos suman una potencia de 56,6 MW, por lo que la potencia global en Menorca aumentará en más de un 35 por ciento.
Ampliación
Cabe recordar que el parque Agrisolar, que ocupa una superficie de 20 hectáreas dentro de una parcela de 56, tiene previsto ampliar su potencia en una segunda fase hasta los 30 MW, así como la instalación de baterías que permitan almacenar la energía producida para poder verterla a la red en horario nocturno. La normativa le permite aprovechar la conexión que se ha habilitado ahora con la red de alta tensión y no será necesario que vuelva a solicitar un punto de enganche, al mantener la misma potencia nominal.
Desde que a finales de 2023 se inauguró el nuevo parque de Son Salomó en Ciutadella, hasta la fecha el mayor de los instalados en Balears, con prácticamente 50 MW de potencia, la entrada de generadores de energía renovable en la Isla había quedado en suspenso a la espera, por un lado, de la necesaria ampliación de las subestaciones de Es Mercadal y Dragonera (Maó) para dar entrada a nuevos operadores, pero también a la ejecución de las obras de los parques que ya tienen autorización. Cabe recordar en este punto que en estos momentos no existe capacidad en las subestaciones para poder autorizar nuevos proyectos de energía renovable.
Red Eléctrica también ha finalizado los trabajos de ampliación de la subestación de Dragonera para permitir la entrada del que será el mayor parque solar de todo el Archipiélago, el que se está construyendo entre las inmediaciones de la subestación mahonesa y en fincas situadas entre Sant Climent y Alaior. Se trata del parque Menorca Renovables II, con una potencia de 60 MW, que ya tiene luz verde para conectarse cuando terminen las obras. Fuentes de la empresa promotora explicaban ayer a este diario que está previsto que el nuevo megaparque entre en operación en el primer semestre del año que viene.
Otros dos parques de menores dimensiones también encaran la recta final para su conexión a la red eléctrica, el Rafal Sun, en la finca de Rafal Vell de Ciutadella, y el Tornaltí Sun, en las cercanías del aeropuerto. La empresa promotora de ambos, que suman 4 MW de potencia, explica que está en la recta final, ultimando las tramitaciones para ponerlos en funcionamiento en breve. También tiene autorizado otro de 2 MW en Binibèquer, pero en este caso ni siquiera han arrancado las obras.
Las baterías de Es Mercadal, claves
Red Eléctrica prosigue a buen ritmo con las obras de instalación de los sistemas de baterías en las inmediaciones de la subestación de Es Mercadal, que prevé concluir a finales de este año o principios del que viene. Esta nueva infraestructura resultará crítica para garantizar la evacuación de la producción renovable y para reducir la dependencia de la central térmica de Maó, permitiendo más que doblar la energía que se transporte por el cable eléctrico submarino.
El TalaGOB HAS DEMOSTRADO SER MUY FALSO !!