El servicio de control de accesos a las playas vírgenes de Ciutadella finalizó ayer, tras haberse prolongado este año. La empresa encargada de prestar el servicio ha sido Andanza Emplea, con sede social en Madrid, después de que la Fundació per a Persones amb Discapacitat renunciara a asumir el encargo debido a la ampliación de días y horas que el Consell impulsó para hacer frente a la creciente masificación.
La nueva empresa tuvo que subrogar a los trabajadores, pero ayer estos denunciaban que se han sentido muy solos a lo largo de la temporada, ya que nadie de la empresa ha pisado la Isla. También se han sentido desatendidos al solicitar apoyo a las fuerzas de seguridad y al Ayuntamiento cuando han pedido ayuda ante algunos conflictos con los usuarios.
Para lo que sirven ,mejor poner jn perrito es mas educado, que los muebles de lujo que tenemos.