El Consell insular intenta revertir 32 años de abandono de la antigua base militar norteamericana en S’Enclusa con la contratación de unas obras de conservación del recinto, tanto de los terrenos como de las instalaciones y edificios que dejaron de tener uso definitivamente en 1993.
El proyecto que ahora licita la institución se enmarca en el Plan de Sostenibilidad Turística 2022 (PSTD-S’Enclusa) y supone una inversión de 310.122 euros (con IVA) dirigida a recuperar las condiciones de seguridad, salubridad, accesibilidad y decoro exigibles a los edificios, así como a la prevención de incendios.
El Consell Executiu del Consell de Menorca ha aprobado el proceso de licitación con un plazo de presentación de ofertas que finaliza el 10 de noviembre y de tres meses para la ejecución de las obras, a partir de la obtención de la licencia municipal y la firma del acta de replanteo de las obras.
Estas se guiarán por un informe del estudio de arquitectura Fuster Més, incluido en el pliego de prescripciones y condiciones técnicas, en el que se detalla el estado actual de S’Enclusa y las actuaciones que se necesitan para asegurar estructuras y mantener en condiciones de seguridad y salubridad el complejo, que hoy día se encuentra en estado ruinoso, tanto por fuera como por dentro, y lleno de pintadas en paredes y fachadas.
El informe elaborado por Fuster Més señala las patologías detectadas en los distintos edificios del complejo, en gran parte derivadas por el desgaste de más de 60 años soportando las inclemencias meteorológicas y por el desuso, a lo que se añaden actos vandálicos que han destrozado puertas y ventanas y han llenado las fachadas de pintadas y grafitis. Las obras de la base se iniciaron en 1963 y esta funcionó desde 1965 hasta su cierre definitivo en 1993.
Las acciones que se piden en la licitación, siguiendo el informe, son dar estabilidad a los edificios; retirar escombros y evitar posibles derrumbes para garantizar la seguridad de las personas; desbroce, limpieza y otras acciones encaminadas a evitar la degradación continuada de los edificios; y resolver las patologías que afectan a la accesibilidad.
Más de 300mil euros ahora para despues gastarnos no se cuantos millones para hacer el pozo sin fondo por el cual ya se perdieron varios millones.