La compraventa de viviendas de nueva construcción ha repuntado en Menorca a niveles que no se veían desde hace 15 años, en los albores de la crisis inmobiliaria. Según los datos hechos públicos por el Institut d’Estadística de Balears (Ibestat), entre enero y agosto del presente año se han cerrado 412 operaciones, 112 más que en el mismo periodo del año anterior, un incremento del 37,3 por ciento que ofrece un nuevo síntoma de la reactivación de la construcción de vivienda nueva que de la que han venido informado desde el sector en el último año y medio, muy centrada, eso sí, en inmuebles para clientes de alto poder adquisitivo.
La estadística de transmisiones de derechos de la propiedad revela que en los ocho primeros meses del año se han cerrado un total de 1.192 operaciones de compraventa de viviendas, 187 más que hace un año, un incremento del 18,6 por ciento, que se explica principalmente por el comportamiento del mercado de obra nueva, que este año representa ya el 34,5 por ciento del total. Se acelera así una tendencia al alza de este tipo de transacciones que ya se empezó a apuntar el año pasado, cuando ya se registró un incremento del 14,5 por ciento respecto a 2023, año en que el porcentaje de vivienda nueva sobre el total apenas superaba el 16 por ciento.
Las cifras de transacciones de vivienda nueva están muy lejos de los valores que se registraban en el año 2008, cuando se cerraron 783 operaciones, casi el 75 por ciento del total. A partir de ese año la estadística muestra un desplome de las operaciones. El sector ha vivido en los tres últimos lustros una parálisis en la promoción de vivienda privada que en el último año se ha reavivado. Los datos del Col·legi d’Arquitectes de les Illes Balears (COAIB) muestran como entre junio de 2024 y junio de 2025 han pasado por la demarcación menorquina 323 proyectos de obra nueva, una cifra que prácticamente dobla la registrada en el mismo periodo del año anterior.
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