El otoño lluvioso adelantó ayer de improviso su llegada a Menorca con una tromba imponente de agua que ocasionó numerosas inundaciones en calles, sótanos, casas particulares y establecimientos comerciales. Los bomberos de Maó tuvieron que realizar 30 intervenciones en sótanos, garajes y parcelas inundadas, y 4 los de Ciutadella. En el levante insular llegaron a caer hasta 137 litros por metro cuadrado en Sant Lluís, 116,7 litros en la zona de Trebalúger (Es Castell), y 80 en Es Castell, entre las 12 del mediodía y las 15 horas.
El incidente más destacado, no obstante, se produjo en los Apartamentos Arenas de Son Bou, donde la riada provocó un movimiento de tierras y el hundimiento de una acera que obligó a desalojar a 80 turistas italianos ubicados en 30 apartamentos del mismo complejo, sobre las 5 de la tarde.
Las intensas lluvias originaron además un corte en el fluido eléctrico que suministra la compañia Endesa afectando a 177 usuarios en la urbanización de S'Algar, en Sant Lluís, restablecido provisionalmente horas después, y un disparo de línea en Es Castell.
La tormenta se desplazó más tarde hacia la zona de Ciutadella donde llegaron a registrarse 67 litros por metro cuadrado entre las 15 y las 16.30 horas en algunos puntos del municipio. De nuevo hubo inundaciones en el Polígono Industrial, frente al campo de fútbol de Son Marçal, que afectaron al edificio donde se ubica el comercio Toy Planet. Su planta baja acumuló grandes cantidades de agua por el deficiente funcionamiento de la red de evacuación de las pluviales. Bomberos y empleados tuvieron que achicar los 80 centímetros del líquido elemento acumulado en su sotano, de unos 500 metros cuadrados, informaron sus responsables. «Otra vez nos ha vuelto a suceder y estamos sacando el agua como podemos. El material está encima de las estanterías en la planta baja y no ha habido muchos desperfectos», explicaron fuentes del comercio que ya se ha visto en estas circunstancias en otras ocasiones.
Fue sobre el mediodía cuando comenzó la descarga de agua en el levante insular. Como suele ser habitual el alcantarillado no bastó para evitar las inundaciones que enseguida se produjeron en el Polígono Industrial de Maó, con las consiguientes retenciones de tráfico en el perímetro e interior de la ciudad. Las riadas originaron estampas espectaculares en los accesos al puerto, algunos de cuyos comercios sufrieron inundaciones de distinta consideración.
Otro tanto sucedió en Es Castell donde la entrada a Calasfonts derivó en un torrente agitado que conducía hacia el pequeño puerto afectando a todos los comercios y restaurantes de la zona por la gran fuerza con la que corría por la calle principal.
La intensa descarga inundó la segunda planta de la Unidad Básica de Salut de Es Castell lo que obligó al traslado de varias consultas a otros centros y a una reorganización de los servicios. La acumulación de agua provocó desperfectos en el falso techo.
También el Consell Insular de Menorca se vio afectado por una tubería atascada que llenó de agua la planta sótano. El Centre Polivalent Carles Mir, en Bintaufa fue otro de los perjudicados por el agua y precisó la intervención de los bomberos.
La lluvia se vio acompañada, además, por 3.000 relámpagos alrededor y en el interior de la Isla. La inestabilidad continuará durante el día de hoy para el que se prevén más precipitaciones. La alarma amarilla volverá a estar activada.