Dispuesta a disfrutar de un fin de año diferente, exótico y reunirse con su hijo, Felicidad Pons Gomila, de Es Castell, madre del mejor ajedrecista español de todos los tiempos, Paco Vallejo, voló el 31 de diciembre a Dubai, uno de los siete Emiratos Árabes Unidos. Sin embargo la ilusión de la mujer por conocer ese país a punto ha estado de convertirse en una tragedia con un desenlace fatal que, en todo caso, va a tener unas consecuencias personales muy perjudiciales dado el elevado coste de las atenciones médicas que ha recibido en Dubai.
Desde el 8 de enero, Felicidad, de 65 años de edad, ha permanecido ingresada en el Saudí German Hospital, hasta anteayer, debido a una infección que acabó provocándole una neumonía severa y la llevó al estado de coma en la Unidad de Cuidados Intensivos, del que salió después de tres semanas. Anteanoche, solventado el entramado burocrático, pudo viajar a Madrid acompañada por un médico español del mismo hospital que regresaba a nuestro país y que ha prestado toda la ayuda posible a la familia, indignada por el «nulo» apoyo que han recibido de la embajada española. A su llegada al aeropuerto Adolfo Suárez ayer le aguardaba una ambulancia que la condujo al Hospital Gómez Ulla de Madrid, donde seguirá su lenta recuperación hasta que puedan solventarse los trámites de Sanidad entre una comunidad y otra para que la evacúen a Menorca. De momento fue la familia quien tuvo que abonar ayer la ambulancia.
En principio, Felicidad, que había viajado a Dubai junto a una amiga de Ciutadella, debía regresar a Menorca el 11 de enero. Su amiga lo hizo pero ella cumplió el jueves un mes ingresada en el hospital. Aún no ha asimilado lo que le ha sucedido ni lo que le espera en función de la elevada factura médica que va a tener que abonar. En el Saudí German Hospital cada día de ingreso en la UCI tiene un coste de 5.000 euros aunque el centro le ha rebajado en parte la factura.
Su hijo Paco, con quien se reunió en Dubai el mismo 31 de diciembre ya que el ajedrecista acababa de disputar el Mundial de partidas rápidas en Arabia, denuncia la indefensión de su madre. Señala que el Banco Santander al que contrató el seguro, «con el que creyó viajar tranquila a Dubai», no se va a hacer cargo de nada ya que la tarjeta solo cubre accidente, muerte o minusvalía.
Vallejo aguarda una respuesta del departamento de atención al cliente al que se dirigió el 25 de enero, y también ha escrito a la propia presidenta del grupo Santander, Ana Botín: «Le escribo aquí porque además de su oficina (que nos ha dispensado un trato nefasto en todos los aspectos), sigo sin una mísera contestación», indica el ajedrecista en su cuenta de Facebook. Vallejo explica a Botín, que «mi madre se durmió feliz y ha estado en coma durante un mes, ahora mismo no sabe ni dónde está, y mi pregunta es, cuando entienda la situación, cómo le explico que lo ha perdido todo».