El padre acusado de haber pegado a su hija de 11 años el pasado 19 de marzo cuando ambos se encontraban en el interior del coche, en Ciutadella, quedó absuelto en el juicio celebrado el pasado jueves en Maó.
Un acuerdo entre las partes motivó que no fuera necesaria la declaración de los implicados y evitar así que la niña tuviera que pronunciarse ante el juez sobre lo sucedido.
El pacto se basa en la rectificación del régimen de visitas que tendrá ahora el padre respecto a su hija puesto que hasta que se produjo este hecho tenían la custodia compartida con la madre de la menor, que a partir de ahora será solo de la madre. La rectificación de estas medidas se hará por la vía civil aunque el acuerdo ya existe.
La madre de la menor denunció al padre después que este hubiese dado una bofetada a su hija en la boca, además de estirarle el pelo y zarandearla. El juicio se había fijado, en principio, para el pasado martes en Ciutadella, aunque finalmente se suspendió y tuvo lugar el jueves en Maó.