El joven de 24 años acusado de vender marihuana a una menor de 14 años en 2016, en su casa de Maó negó la acusación en el juicio celebrado este martes. Aseguró que la denuncia respondió a la venganza de la adolescente al estimar que él había extendido el rumor de que había mantenido relaciones con ella.
La menor, con pasado conflictivo por haber desaparecido en varias ocasiones, ratificó su denuncia y señaló que dos veces le había vendido droga en su casa, explicando el código que utiliza el acusado para avisar a sus clientes en el móvil para que estos sepan si está en casa o tiene sustancias para la venta. El juicio se suspendió por la ausencia de un testigo de la defensa y se reanudará el 11 de julio. El fiscal le pide 4 años de prisión.