Rubén Ropero Llabrés, de 28 años de edad, natural de Ciutadella, falleció el este martes en Eivissa cuando trabajaba a 40 metros de profundidad en el emisario de la depuradora de la ciudad de Eivissa, en aguas próximas a la bocana del puerto.
El joven cuya última residencia en Menorca hasta su desembarco en Eivissa había sido la urbanización de Es Grau, era buzo profesional y había sido contratado por una empresa que a la vez estaba subcontratada por Cadagua, filial de Ferrovial Agroman, encargada del mantenimiento del emisario.
Al parecer el buzo ciutadellenc estaba trabajando con otros tres profesionales cuando sufrió la parada. Fueron estos quienes lo sacaron del agua y lo transportaron al muelle en una embarcación neumática mientras trataban de reanimarlo.
Los técnicos sanitarios continuaron con esas tareas de reanimación ya en tierra, pero no dieron resultado. La policía judicial de la Guardia Civil de Eivissa investiga el accidente.