Una casa flotante de alquiler atracada en el andén de poniente del puerto de Maó se hundió durante la madrugada del miércoles, al parecer, como consecuencia de una vía de agua abierta en uno de los flotadores que le dan estabilidad.
La barca, con planta y terraza de casi 50 metros cuadrados, comenzó a escorarse cuando estaba ocupada por una familia de cuatro miembros, los padres y sus dos hijos, que abandonaron rápidamente la embarcación.
Poco después acabó girando sobre sí misma con los flotadores hacia arriba sin que hubiera que lamentar desgracias personales. La casa flotante pudo ser remolcada hasta el otro lado del puerto parta situarla frente a la grúa travel lift donde la empresa Pedro's Boat, de acuerdo con la de la propiedad, pudo realizar un trabajo minucioso para volver a darle la vuelta, primero, e izarla más tarde hasta dejarla varada en el muelle. La compleja operación se realizó por la tarde, una vez el perito revisó la embarcación que pudo ser sacada del agua evitando que se resquebrajara. Los daños interiores fueron cuantiosos debido al vuelco y al agua acumulada en su interior.
La empresa que gestiona su explotación, «Navega por Menorca», con sede en el Moll de Ponent del puerto de Maó, se limitó a confirmar ayer el vuelco completo de la embarcación sin ofrecer más detalles de las causas ni las circunstancias que rodearon el hundimiento de la casa flotante «porque no sabemos lo que ha pasado hasta que peritos y abogados nos lo digan».
Autoridad Portuaria informó que la casa flotante está inscrita como embarcación de recreo en lista 6ª, es decir con fines lucrativos. Estaba amarrada en la Marina Poniente, gestionada por una empresa a través de una concesión.
La embarcación, construida este mismo año, se puede alquilar de julio a septiembre a 300 euros diarios, con capacidad para que duerman cuatro personas. Tiene una terraza superior con jacuzzi y barbacoa y un motor fueraborda que puede alcanzar tres nudos de velocidad.