La Policía Nacional de Maó detuvo el martes a un individuo que había agredido a su novia en plena calle, y posteriormente hizo lo propio con un hombre que pasaba por el lugar y se interpuso entre ambos.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del domingo cuando el agresor, de 26 años, estaba golpeando en la cara a su novia. Dos hombres que vieron la escena acudieron para frenar la agresión pero el joven que resultaría detenido reaccionó dando un puñetazo a uno de ellos. Este perdió el equilibrio, cayó al suelo y se fracturó el tobillo.
Tras la agresión el maltratador huyó del lugar mientras el agredido y su amigo acudían a la Comisaría para presentar la denuncia que acompañaron con un parte médico en el que constó el golpe en el labio y la fractura del peroné. La Policía inició la investigación y el martes logró detener al agresor.
Un bravo que aplica la ley de sus puños como tantas veces hemos podido ver en las noticias, con sus daños colaterales a quien pretende mediar poniendo paz. Mejor llamar a la policía que meterse en medio. Espero que el agresor pague indemnizaciones a todas las partes y que se mejoren los agredidos.