Un taxista del área de Maó ha sido atendido en el servicio de Urgencias del Hospital Mateu Orfila con múltiples contusiones a consecuencia de la agresión que ha sufrido esta madrugada, sobre las 6, en la calle Fort de L'Eau, de la misma ciudad.
El conductor, de 55 años de edad, se había detenido en la rotonda de esa vía, que conecta con la cuesta de Corea, con el propósito de recoger a tres turistas británicos. Al parecer, cuando ha descendido del vehículo para facilitarles la entrada ha sido cuando estos le han agredido violentamente hasta lanzarlo al suelo junto al taxi, un Toyota Corolla. Poco después una ambulancia del 061 ha trasladado al taxista al centro hospitalario donde continúa ingresado.
Una patrulla del Cuerpo Nacional de Policía ha acudido al lugar de la agresión, aunque a su llegada los presuntos autores ya se habían marchado apropiándose, además, del teléfono del taxista.
Borrachos y agresivos
Se da la circunstancia de que en una comunicación interna de un grupo de taxistas en el que no figura el agredido ya se había advertido que había tres turistas británicos borrachos y agresivos frente al restaurante Jágaro, en el puerto de Maó. En este mismo grupo se informó que otro taxista se había negado a recogerlos al ver su estado etílico y estos respondieron lanzando objetos contundentes a su vehículo.
Probablemente, los turistas subieron por la Cuesta de Corea andando y fue al llegar a Fort de L'Eau cuando agredieron al otro conductor que no estaba informado de su agresividad.
La Policía Nacional aguarda la interposición de la denuncia para investigar la agresión y tratar de localizar a los presuntos autores. En la central del colectivo, en principio, consta el número británico de uno de los turistas cuando realizó la llamada para solicitar el servicio.
Esto es lo que pasa cuando en un país se protege a los delincuentes en vez de a las víctimas.