Dos de los tres acusados de un delito contra la salud pública por expandir la ingesta de marihuana a terceros desde el club cannábico de Maó al que pertenecen fueron condenados este martes a un año de prisión y al pago de una multa subsidiaria de 25.000 euros.
Los dos inculpados aceptaron el acuerdo de conformidad al que llegaron sus abogados y el Fiscal en el juicio celebrado en el Juzgado Penal de Maó. El tercer detenido por la Policía Nacional en octubre de 2019 ya no reside en España y se halla en paradero desconocido.
El Ministerio Público solicitaba una condena de dos años de prisión que finalmente quedaron en uno. El Magistrado Juez, Antonio Fernández-Montells aceptó la suspensión de la ejecución de la condena al carecer ambos de antecedentes penales siempre que no delincan en el plazo de dos años.
El escrito de acusación del Fiscal rebajaba considerablemente la cantidad de la droga que había intervenido la Policía en la finca en la que la cultivaba uno de los acusados, y en los domicilios de dos de ellos, contiguos al local de la asociación cannábica. La Policía informó en su día que se habían hallado 68 kilos de marihuana pero una vez analizada la aprehensión y los decomisos de plantas, hojas secas y cogollos arrojaron un peso de algo más de cuatro kilos de sustancia, destinados al consumo por parte de los socios de este club cannábico que estaba escrito en el registro balear pero no en el nacional del Ministerio del Interior. Contaba, además, según uno de los abogados, con la autorización de la Guardia Civil en el cultivo de la hierba.
El valor de la marihuana que encontraron los agentes en los registros era de unos 21.000 euros, según los análisis aportados por un perito de la defensa.
Dado que el tercer acusado está desaparecido, los dos condenados deberán hacer frente al pago total de la multa.