La escultura 'La aguja de la giganta' ha reaparecido esta pasada madrugada sobre la misma arena de la playa de Mongofra, su ubicación durante los diez últimos años, hasta que fue arrancada y sustraída durante el pasado fin de semana.
El arrendatario de Mongofra ha sido quien descubrió la escultura en la playa, por lo que se ha puesto en contacto con la autora, Nuria Román para informarle del hallazgo. La artista, con la colaboración del payés de la finca, ha transportado este mismo jueves el tronco esculpido en forma de aguja gigante hasta un taller para que procedan a su reparación.
La escultura presenta algunos desperfectos por los efectos de la erosión del mar y por haber sido arrancada de su pedestal por los autores del acto vandálico, pero mantenía su estructura a lo largo de sus 5 metros de longitud.
La hipótesis más razonable que se baraja es que los autores de la gamberrada consiguieron subir la obra de Román hasta las rocas, a un lado de la cala, y desde allí lanzaron la escultura al mar. La misma marea ha acabado devolviéndola a la playa días después.
El conseller de Cultura, Miquel Angel Maria, ha indicado que abordarán desde la calma la nueva situación para decidir con la artista cuál será el futuro de la escultura que forma parte de un proyecto global land-art. «Se acaba así una historia triste y ahora la dejaremos reposar hasta tomar una decisión».