La Policía Nacional de Maó ha dado por resueltos cinco de los seis atracos ocurridos en los últimos días en el centro de la ciudad y en dos comercios de las calles Sant Manuel y Borja Moll que habían causado alarma entre comerciantes y población en general.
Los agentes detuvieron el jueves al autor de estos cinco robos con fuerza al que cazaron casi in fraganti después de haber violentado la verja y la puerta de la tienda APP Informática. Fue la culminación al dispositivo de vigilancia que había establecido el cuerpo nacional, en colaboración con la Policía Local, desde el pasado fin de semana para confirmar las sospechas sobre el mismo delincuente al que ya habían detenido el viernes día 2. Dos días después también arrestaron a su pareja, una mujer española de 37 años, ambos como autores de los robos en el estanco de la calle Sant Manuel, y en una pajarería de la calle Ciutadella.
Entonces ambos quedaron en libertad tras prestar declaración ante el juez, pero entre el miércoles y el jueves el hombre volvió a la carga y asaltó el restaurante Cala Bella, en la calle Bonaire, y lo intentó destrozando la verja del bar Can Xavi, entre la plaza Bastió y la calle s'Arraval.
'Pillado' por las cámaras de vigilancia
Las imágenes de las cámaras de vídeo dieron más pistas que conducían al mismo atracador de los delitos anteriores. De esta forma, los cuerpos policiales armaron un dispositivo para controlar varios puntos de la ciudad, que dio resultado el jueves por la mañana cuando el mismo individuo fue a robar a la tienda de informática de la calle Borja Moll.
Los agentes llegaron a tiempo para echarle el guante cuando huía con el material robado, una torre de ordenador y diversos objetos periféricos. Una vez detenido, la Policía completó la investigación para llegar a la conclusión de que él era el responsable de todos los robos que han alertado a la ciudad estos días, a excepción del de la joyería de la calle Hannover. Los investigadores ya andan tras la pista de otro delincuente sospechoso por este acto.
Ingreso en prisión preventiva
El mediodía de este viernes el hombre detenido fue puesto a disposición judicial y declaró ante la jueza del Juzgado de Instrucción número 2 de Maó. De acuerdo con la fiscal, decidió su ingreso en prisión preventiva mientras se completan las diligencias que deben derivar en el juicio bajo la acusación de los delitos de robo con fuerza.
El hombre, español y residente en Maó, tiene un largo historial delictivo, con antecedentes penales y judiciales, también en el archipiélago canario, donde residió un tiempo. Explicó en su declaración que tuvo que lanzarse a robar para conseguir efectivo que le permitiese adquirir drogas dada su adicción. Por este motivo la Policía cree que vendió rápido el material sustraído, ordenadores, cartones tabaco, botellas de alcohol y dinero en efectivo, que junto a los daños causados ascienden a unos siete mil euros.