Un tribunal de la sección primera de la Audiencia Provincial juzga este jueves a un hombre de Ciutadella, acusado de apropiación indebida y estafa cuando trabajaba como agente de seguros para la compañía Ocaso Seguros y Reaseguros, en la ciudad del poniente insular, entre septiembre de 2021 y febrero de 2022.
El Ministerio Fiscal concluye que el procesado se quedó con 61.996 euros de la aseguradora y le acusa de apropiación indebida continuada pero no de estafa, como sí solicita, además, el abogado de la compañía. El hombre se enfrenta a una condena de dos años y medio de prisión, según la solicitud del fiscal, mientras que la acusación particular la eleva a siete años de cárcel por la suma de ambos delitos. Si finalmente resulta declarado culpable deberá indemnizar a Ocaso con la cantidad presuntamente apropiada de forma indebida.
En el escrito de acusación se considera como atenuante que el hombre estaba afectado por su adicción al juego al sufrir un trastorno de ludopatía. Entonces tenía afectadas parcialmente sus facultades intelectivas y volitivas por esta patología, lo que incidió en que cometiera los delitos por los que ahora será juzgado.
Está acusado de haber incorporado a su patrimonio en aquellos meses un total de 61.996 euros que le habían ingresado varios clientes, entre ellos, uno por una cuantía de 9.980 euros, otro de 10.000, o uno más de 1.700, según describe el fiscal en el escrito de acusación. La defensa ofreció una cantidad a la aseguradora para evitar el juicio el pasado verano, pero esta la consideró completamente insuficiente.
Le NormandMás que del mambo, diría que del coro