Moverse con un patinete por Maó sin tenerlo asegurado ante posibles daños a terceros puede salir muy caro. La Policía Local ha tramitado esta semana tres denuncias a conductores de vehículos de movilidad personal por incumplir la ordenanza municipal que, desde el año 2021, regula su circulación. Los patinetes, además, han quedado inmovilizados en el depósito municipal.
La Policía Local de Maó ha dado a conocer estas sanciones, que ascienden a 500 euros cada una, a través de sus redes sociales en el marco de una campaña de sensibilización para los conductores de este tipo de vehículos. Además del seguro obligatorio, el ayuntamiento obliga a circular con elementos reflectantes, iluminación y timbre. Se recomienda hacer uso del casco y la edad mínima para conducirlos es de 15 años.
Los patinetes eléctricos tienen prohibido circular por las aceras y zonas de peatones, así como ir por la calzada en dirección contraria al resto de vehículos. La Policía Local destaca la importancia de cumplir estas normas para la correcta convivencia entre los vehículos de movilidad personal, peatones y ciclistas.
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