El documento con las doce medidas para los primeros cien días de gobierno del Consell, aprobado el 9 de junio por PSOE, Més y Podemos, motivó la difusión ayer del balance de la gestión realizada. El procedimiento de adjudicación de la gestión de la planta de tratamiento de residuos de Milà se examinó sin alterar el proceso; el plan de choque contra la exclusión social se halla en fase de «reunión con los ayuntamientos para empezar a poner las bases»; no se han suspendido, de forma inmediata, «los aspectos desreguladores de la Norma Territorial»; y para la carretera se ha pedido una reprogramación a Fomento, eso sí, deteniendo las obras para suspender el contrato; el Consell Econòmic i Social aún no ha celebrado la sesión constituyente; y el portal de transparencia permitirá el seguimiento de la gestión y actividad de cada conseller, cuyas agendas serán públicas.
Los primeros compases del gobierno insular ponen de manifiesto voluntad política, determinación y compromiso, pero también evidencian las dificultades para lograr los objetivos fijados, acentuadas por el funcionamiento de la administración y los recursos disponibles. Los presupuestos del 2016 marcarán el rumbo, las acciones y prioridades del Consell.