La reforma de la Compilación del Derecho Civil aprobada por el Govern balear, que entrará en vigor a finales de año, tras superar la tramitación en el Parlament, beneficiará a los menorquines, que podrán adelantar las herencias en vida con una tributación del 1 por ciento. Tal como ha explicado el conseller Marc Pons, que había impulsado esta iniciativa durante su etapa al frente de la Conselleria de Presidencia, se corregirá el agravio comparativo que en la actualidad sufren los menorquines, obligados a pagar más por la donación de sus bienes en vida a los herederos.
Una vez haya sido aprobado la reforma, los denominados «pactos sucesorios por definición» y la donación universal serán aplicables en Menorca, única isla que no contaba con una regulación específica.
Otra modificación destacable consiste que Menorca percibirá dos tercios de las herencias de los menorquines que fallezcan sin testamento: un tercio para el Consell, otro para el ayuntamiento respectivo, y un tercio para la Comunidad Autónoma. Hasta ahora estas herencias intestadas pasaban directamente al Estado. Además, se establece la obligación de destinar los recursos a finalidades sociales.