El Govern ha redactado unos presupuestos autonómicos expansivos para el 2017, con un crecimiento global del 10 por ciento, lo que implica un nuevo endeudamiento de 1.071 millones de euros. Quedan garantizadas las subidas en Sanidad, Educación y Servicios Sociales; y el mayor incremento se registra en Medio ambiente, gracias a los ingresos de la ecotasa.
El único capítulo que no aumenta es el destinado a la promoción turística, tras haber aceptado los empresarios de este sector, clave para la economía de las Islas, la aplicación de la ecotasa. En esta decisión del Govern ha pesado la sensación de saturación que vivió este verano, principalmente en Mallorca y Eivissa. Las Balears son conocidas como destino vacacional, con el resultado de una oferta hotelera insuficiente mientras se ha disparado el alquiler de viviendas, pisos y apartamentos de particulares. El archipiélago necesita equilibrio y sostenibilidad, sobre todo medioambiental. Constituye un contrasentido que el Govern deba volver a endeudarse, sobre cuando la economía balear vuelve a funcionar. Una grave contradicción que se resolverá con una financiación digna, que mitigue el actual déficit fiscal.