El conseller Marc Pons desveló ayer en el Parlament, al contestar la pregunta formulada por la diputada Misericordia Sugrañes, que el Govern ha presentado alegaciones para ampliar el proyecto del Ministerio para la Transición Ecológica en la central térmica del puerto de Maó destinada a la reducción de las emisiones contaminantes.
El departamento que dirige Teresa Ribera prevé actuar únicamente en dos de los ocho equipos generadores instalados. La diputada Sugrañes se hizo eco y expuso en sede parlamentaria la advertencia formulada por Endesa, compañía que genera la energía eléctrica en la central de la Colàrsega mahonesa, al reclamar que se lleve a cabo la adecuación de al menos tres de las ocho turbinas.
La normativa europea en materia de emisiones industriales que afecta a la central de Menorca entrará en vigor el 1 de enero del 2020. La Comisión Europea ha advertido que no prorrogará esta fecha, lo que constituye una cuestión prioritaria para nuestra Isla, agravada por el hecho que toda la electricidad que se consume, mientras no se instale el nuevo cable submarino, se genera en la central de Maó. Es preciso reducir las emisiones en más turbinas.