La doble cita electoral de este año -cuya primera vuelta son las generales del 28 de abril- transcurre en un escenario inédito, con quince partidos y coaliciones que han registrado candidaturas en Balears para obtener escaño en el Congreso. Los estudios demoscópicos asignan hoy representación parlamentaria a cinco formaciones nacionales: PSOE, PP, Ciudadanos, Podemos y Vox.
Un contexto desconocido donde el bipartidismo es el pasado al haber sido desbordado por una fragmentación, con acusada incidencia en la derecha, que exigirá acuerdos postelectorales entre varios partidos para formar Gobierno. Los resultados del 28-A influirán sobre los del 26-M, primera y segunda vuelta. La Ley d'Hondt prima al más votado, y las tres derechas, a pesar de obtener más sufragios, no tienen asegurada la mayoría ni tampoco que vayan a gobernar al existir varias opciones en este momento de incertidumbre y volatilidad. Las encuestas no dan representación en el Congreso a partidos de las Islas como Més y el PI, pero la caída del techo electoral y los réditos obtenidos por otras autonomías con sus diputados propios, como Canarias, abren la puerta a que se consiga por primera vez.