En el inicio de una temporada turística marcada por la incertidumbre, Turquía se ha convertido en una gran ‘amenaza' para Balears. La debilidad de la lira turca frente a otras divisas ha provocado que aquel país resulte extraordinariamente atractivo para el turismo por sus precios cada vez más asequibles. Tan baratos son que Turquía ha parado los descuentos por venta anticipada, porque sus ventas han superado las previsiones de comercialización en el mercado británico. Las tensiones políticas de una república que se extiende entre Europa y Asia no afectan al sector turístico turco.
Con los descuentos de los hoteleros de Balears, que ya alcanzan el 50 por ciento, los touroperadores británicos venden paquetes de vacaciones en las Islas a precio de saldo para reactivar las reservas, que ahora están paralizadas. La presión de Turquía ha provocado una guerra de precios que en nada beneficia al sector turístico balear. El vicepresidente de Meliá Hotels, Gabriel Escarrer, denuncia que Balears no es competitiva por estas ofertas y descuentos. Se impone la unidad de instituciones y empresarios para afrontar la caída de la ocupación por la reducción en la llegada de alemanes y británicos.