El Indice de Confianza Empresarial que esta semana ha publicado el Govern constata un pesimismo generalizado y el hundimiento de las expectativas de negocio en la Isla porque solo el 2,3 por ciento de los empresarios de Menorca prevé una evolución favorable de la economía local. Las respuestas son descorazonadoras porque solo un 5,7 por ciento manifiesta que incrementará sus inversiones mientras que el 44,8 por ciento -que representa el porcentaje más alto de Balears- contesta que el volumen de la inversión será desfavorable durante este año. El momento de mayor pesimismo empresarial se registró en Menorca en abril de 2020, en pleno confinamiento, cuando un 84,8 respondió que esperaba una desfavorable evolución de la facturación; una cifra que hoy se sitúa en el 63,2 por ciento.
En este escenario, cuando una de cada cinco pymes se plantea cerrar se da por perdida la Semana Santa y se desconoce cuándo empezará la temporada turística de este año, aún no se ha concretado cómo y cuándo pagará el Govern los 1.500 euros mensuales para bares y restaurantes que anunció el 15 de enero durante el primer trimestre del año. Son ayudas directas cuyo abono no se puede demorar.