La amenaza de derribo de las casetes de vorera de Menorca, ordenado desde Madrid por la Dirección General de la Costa y el Mar, quedará neutralizado si prospera la propuesta registrada por el PP a través del senador por Menorca, Cristóbal Marqués. Consiste en modificar la Ley de Costas de 1988 para excluir del dominio público marítimo-terrestre y de las operaciones de deslinde, los núcleos costeros «singulares y con especiales valores etnológicos».
La presidenta del PP menorquín, Misericordia Sugrañes, que ha presentado esta iniciativa con el senador Marqués, afirma que «damos respuesta a quienes se ven perjudicados por la denegación de la prórroga de las concesiones». Cristóbal Marqués espera obtener el apoyo de los otros grupos en el Senado al «dar soluciones para evitar la desaparición de estas construcciones con valores patrimoniales». Al mismo tiempo, un informe del Servei de Patrimoni Històric del Consell concluye que la protección de las casetes de vorera debe ir más allá de las catalogadas, concretamente las conserven sus valores patrimoniales y mantengan su tipología. Es preciso, por tanto, el acuerdo político para salvaguardar este patrimonio.