La remodelación del Govern, que la presidenta Francina Armengol efectuó hace un año, implicó la creación de una nueva conselleria, la de Fondos Europeos, a la que también se asignó Universitat i Cultura, al frente de la que se encuentra el menorquín Miquel Company. El Mecanismo de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía española fue presentado en octubre de 2020 por Pedro Sánchez que anunció la «ejecución de cerca de 72.000 millones de euros entre los años 2021 y 2023 gracias al instrumento Next Generation UE». Y en junio de 2021 la Comisión Europea aprobó el plan redactado por el Gobierno central, con la previsión de que España ejecutaría 19.000 millones de euros el 2021. Pero la realidad es otra: los fondos europeos se están retrasando, y durante el año pasado solo se cerraron convocatorias y adjudicaciones para 5.200 millones. Para el primer semestre de este año el Gobierno prevé ejecutar 24.198 millones. En este escenario, el Govern debe agilizar e impulsar las convocatorias públicas porque el ‘Plan País' de la UE establece que el 50 por ciento de las ayudas serán gestionadas por las autonomías. El plazo de ejecución es muy corto y es preciso acelerar el proceso. Por tanto, todas las ayudas han de estar asignadas el 2023. La Conselleria de Fons Europeus debe demostrar su solvencia y justificar su existencia.