Francina Armengol cerró ayer un ciclo de ocho años al frente del Govern. Dos mandatos en los que ha simultaneado la presidencia de la Comunitat Autònoma con la secretaría general del PSIB-PSOE. Su compare- cencia en el Consulat, junto con los consellers que han formado el Ejecutivo del Pacte constituyó un balance de los logros alcanzados y una reivindicación de la gestión realizada. «Dejamos un buen legado y estoy orgullosa del trabajo realizado», proclamó al entregar el documento titulado «Traspaso de poderes 2023», donde enumera las medidas aprobadas desde 2015. Armengol subrayó el crecimiento y dinamismo de la economía balear, la paz social alcanzada y el diálogo con sindicatos y empresarios.
Pero no eludió la autocrítica al manifestar que si los ciudadanos han decidido otra forma de gobierno «es obvio que algunas cosas no hemos hecho bien». Las elecciones del 28 de mayo abren un cambio de ciclo político en Balears, evidenciado en la victoria del PP y que pierde quien no gobierna. Armengol tiene su mirada puesta en las elecciones generales del 23 de julio, en las que encabezará la lista socialista al Congreso en Balears. En el debate de investidura dará la réplica a Marga Prohens para seguir liderando al PSIB-PSOE, defender la gestión realizada y volver a optar al Govern en las autonómicas del 2027.