El sector del turismo y el mundo empresarial están de luto por el fallecimiento de Gabriel Escarrer Juliá, fundador y presidente del Grupo Meliá Hotels Internacional, la cadena hotelera española con una mayor proyección. Hay coincidencia al calificar al empresario mallorquín como un pionero irrepetible, un trabajador infatigable que nunca ocultó sus orígenes humildes y que se convirtió en un referente mundial para la industria turística. Con una carrera profesional meteórica, abrió establecimientos en México, República Dominicana, Venezuela, Colombia, Turquía, Marruecos, Túnez y Egipto, junto con una sólida implantación en España, que incluye Menorca.
Un imperio forjado por este emprendedor que fue un visionario adelantado a su tiempo. En 1996, la salida a Bolsa de la cadena hotelera que había creado, supuso la definitiva expansión y consolidación de la compañía. Quienes tuvieron la oportunidad de tratar a Gabriel Escarrer destacan su sencillez y discreción. Le gustaba pasar desapercibido y estar bien centrado en su trabajo. El año pasado designó a su hijo Gabriel como su sucesor y pasó a ser presidente de honor. Su legado y ejemplo son inmensos.