Vaya por delante mi profundo respeto por todos los arqueólogos, incluido Indiana Jones, pero creo que he encontrando la solución al interrogante que todavía pesa sobre el monumento más espectacular y particular de menorca: la Taula.
El debate, aún aceptando su funcionalidad cultural, es intenso en cuanto a teorías: que si rituales, solución constructiva, función social y hasta se relaciona su construcción con fenómenos astrales. Pero intuyo que aquellos menorquines de la Cultura Talayótica eran unos visionarios que nos dejaron un símbolo a modo de mensaje sobre el futuro que nos esperaba a las generaciones venideras.
Ahí va mi aportación a la ciencia. Por algún motivo los hombres talayóticos tuvieron una revelación de los problemas que nos atormentarían en los siglos XX y XXI y quisieron avisarnos colocando dos piedras en forma de T. Ésta es la primera letra de los principales debates que a día de hoy parecen irresolubles: Transporte, Territorio, Turismo. Y acertaron. Llevamos décadas dando vueltas a la noria buscando una solución a las tres T que dominan la actualidad insular.