Los ayuntamientos y Consell están cerrando los presupuestos para 2013, unas cuentas que reflejan en su mayoría una "economía de guerra", que dan poco más que para afrontar el día a día en el actual contexto de crisis. Las arcas están vacías y los ingresos son escasos, lo que hace muy difícil dar respuesta a las necesidades ciudadanas. Por ello es de vital importancia que el Govern salde cuanto antes la deuda que mantiene con las instituciones públicas. Así lo reclamó Santiago Tadeo en la conferencia de presidentes celebrada el miércoles en Palma (al Consell se le deben unos 35 millones) y también lo exigieron ayer los alcaldes menorquines durante la reunión que mantuvieron con el vicepresidente económico, Josep Ignasi Aguiló. El compromiso del Ejecutivo de José Ramón Bauzá es abonar los pagos, pero a día de hoy no existe un calendario concreto que transmita tranquilidad. Una vez que se ha inyectado dinero a bancos y proveedores a través del Fondo de Liquidez Autonómico, la prioridad es cumplir ahora con los municipios, ya sea repitiendo la fórmula o buscando otro tipo de soluciones. Lo que es insostenible es la precariedad en la que están instaladas las administraciones más cercanas a las personas.
Editorial
El Govern debe acelerar el pago de las deudas