Hoy se celebra el Día Mundial del Comercio Justo. Menorca siempre ha sido especialmente sensible a esta cuestión y por eso existen tiendas de S'Altra Senalla, que ofrecen productos que proceden de regiones en desarrollo o que se comercializan con otros valores de los de la economía de mercado. Es interesante aprovechar el Día Mundial para acercarse a una de estas tiendas y comprobar la oferta de productos, ver su procedencia y descubrir la historia que cada uno de ellos tiene detrás. Este año, Caritas Diocesana y la Fundación Vicente Ferrer, han centrado el interés en la producción de azúcar, que cuenta con productores en zonas pobres de muchos países a los que se devuelve muy poco de la renta que genera el comercio internacional.
La crisis ha tenido un efecto sobre la solidaridad internacional. Ha provocado una reducción de las ayudas económicas y una limitación de los proyectos, puesto que las urgencias más próximas absorben la mayor parte de los recursos. El comercio justo es distinto. No busca la subvención sino que pretende que, a partir de nuestra actitud individual como consumidores, colaboremos con quienes trabajan por un futuro más justo.