Síguenos F Y T I T R
Les coses senzilles

New look

|

La canción «Tatuaje» es de 1941, y fue popularizada por Concha Piquer. Aseguran que era una de las más famosas de su repertorio, y ahora mismo me vienen a la mente dos versos que dicen: «Era hermoso y rubio como la cerveza, el pecho tatuado con un corazón». Tener el pecho tatuado con un corazón, o el antebrazo con un ancla como Popeye era entonces algo extraordinario. No digamos ya el hecho de llevar un pendiente en una oreja, como un pirata, o un anillo en el pezón. Esto ya debía ser materia de condenación eterna en una época en que se consultaba la calificación de las películas en una vitrina de Acción Católica y si eran para Mayores con Reparos habías de tener mucho estómago para meterte en un cine a pesar del qué dirán. Entonces las mujeres llevaban trajes de baño completos, con una faldita muy curiosa delante del pubis, y los hombres unos Meyba de lo más ancho que se convertían en bolsas de agua en cuanto se adentraban en el mar. Quién nos iba a decir entonces que la moda de los tatuajes proliferaría hasta límites insospechados, que los hombres llevarían pendientes, que los bañistas solo llevarían gafas de sol y que las películas irían mucho más allá de lo que llegaban las actrices más insinuantes como Sofía Loren o Gina Lollobrigida. Y es que hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad, como se decía en La Verbena de la Paloma, y los tiempos cambian con mayor rapidez de lo que auguraba Bob Dylan.

Cambiar de imagen, nuevo aspecto, new look. Esto es fácil, hoy en día. Y si me apuran un poco incluso se puede mudar, con gran volubilidad, de convicciones. Pero lo suyo es la apariencia, la envoltura, el físico, pelaje, figura, catadura; como se quiera. Aunque existen sabias sentencias que nos advierten que «la apariencia hermosa, y por dentro es otra cosa». Pero este otro refrán, «por la color se vende el paño», viene a confirmar que lo del new look es trascendental en estos días. Es haber nacido con una nariz excesivamente grande y hacérsela recortar. Es tener la barbilla demasiado corta y alargársela. Zas, una cara nueva. Pero en catalán dicen fer una cara nova a pegarle a uno una somanta. New look es no raparse las barbas, sino la cabeza, dejando una cresta de pelo verde a modo de penacho. New look es hacerse la liposucción, es hincharse la cara de Botox, todo apariencia, porque lo difícil debe de ser la cirugía plástica del cerebro. Oiga, doctor, quíteme estas arruguitas, auménteme estas circunvoluciones que quiero ser un genio.

Lo más visto